En el prólogo a «Por si no lo sabes» hablo sobre los objetivos que me animan a fabricar califactos, a escribir poesía y albergarla dentro de la pintura:

«Tienes entre tus manos una parte del experimento artístico de Rui Valdivia: los CALIFACTOS, o la mezcla de CALIgramas y arteFACTOS. Estos artilugios (artesanías cognitivas) funcionan de forma similar a las partituras musicales o a los guiones cinematográficos, porque aspiran a poder orientar la interpretación, en este caso, la interpretación pública de estas poesías audiovisuales en que deseo convertir los CALIFACTOS.»
Este libro incluye una selección de los más de 90 CALIFACTOS que ya he publicado en mi blog (ruivaldivia.net). Pero aquí sólo aparecen los textos, acompañados de una parte de las ilustraciones originales, en blanco y negro. Pretendo así mejorar la difusión de mi trabajo, en un formato, el papel, que considero que todavía posee un gran potencial para ello.
Creo en la fusión de las artes, en la desmitificación del creador o del artista, en la capacidad de la experimentación artística para fundir la emoción con la racionalidad, en la posibilidad de crear imaginarios útiles para la transformación personal y social.
Este libro es un fragmento de un proceso más amplio, consistente en crear un ámbito de experimentación poética y comunitaria. Porque las experiencias artísticas pueden convertirse en armas de construcción masiva.

No existe otra forma de cambiar el mundo, de transformar nuestras mentes, sino a través de la experiencia artística en consonancia con otros cambios a nivel social, político y personal. Aunque también es cierto que cualquier arte no sirve para este propósito.
Para cambiar nuestra realidad tenemos que poder anticipar, de algún modo, el objetivo vital que deseamos alcanzar. Las experiencias artísticas deberían servir, por tanto, para:
- Afinar y adaptar nuestro sistema perceptivo, la forma en que percibimos la realidad actual.
- Imaginar otro mundo, y así poder reconstruir con las imágenes actuales, un imaginario alternativo que ayude a conformar el deseo inexpresable de una nueva realidad.
- Encontrar compañeros de viaje y de experimentación.
Las experiencias artísticas que os propongo son poéticas, y cómo no, también políticas, porque la política resulta consustancial a la experimentación artística, aun cuando muchos deseen ocultarla:
- Poéticas, porque tienen su origen en la palabra poética, en las metáforas orales, a las que iremos añadiendo experiencias musicales, visuales, corporales.
- Políticas, porque desearíamos transformar nuestras personas en consonancia con la realidad que nos afecta.
Deseo participar en experiencias artísticas que provoquen respuestas emocionales, comunitarias y racionales, y por tanto, que inciten a la acción. A través de imágenes y emociones, despertar el deseo.
La poesía, la música, la danza, no existen materialmente hasta que se las interpreta. La interpretación artística se asemeja a la construcción de un artefacto provisional, una máquina o un instrumento que sirve en ese espacio concreto de la interpretación para tentar a la imaginación, para provocar respuestas, para incitar a la acción.
No se trata de mostrar una obra artística acabada, de que unos actores sólo repitan un texto al público, sino de convertir la sala en un laboratorio en el que se prueben diferentes artefactos, donde cada experimento evolucione sin seguir un guion rígido y totalmente predeterminado, y en el que siempre se abra la oportunidad para improvisar y experimentar la libertad.
Lectura sugerida: https://ruivaldivia.net/series/en-las-fronteras-del-arte
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