Arte para la utopía o cómo las experiencias artísticas influyen en la experimentación política, social y comunitaria. Toda experiencia artística es política, en la medida en que es construida activamente por cada sujeto en el marco de unas mediaciones y de un ritual esencialmente sociales.
Constelaciones
Constelaciones
Arte para la vida
Si nos cuesta tanto transformar el mundo presente, abordar proyectos autónomos, alternativos y novedosos, vivir en otro tipo de comunidades más libres y creativas, avanzar en el camino de la autonomía y de la emancipación, es por culpa también de las experiencias artísticas en las que estamos involucrados, mediadas por una publicidad, una propaganda y un mercado de experiencias que no nos ofrecen las oportunidades cognitivas y perceptivas para dar el salto, que sólo nos anuncian la posibilidad hegemónica de un mundo precario y que además nos domina.
El arte como un híbrido
La experiencia artística es algo fabricado por un agente que se ubica en una red de mediaciones y que al hacerlo es capaz de transformar su modo de vida y la realidad que le circunda.
Quiso ser el primero
Quiso ser el primero...
Entre la cultura y la naturaleza
Los occidentales nos hemos situado siempre, en nuestros contactos con otros mundos-culturas, en una situación de privilegio, lo cual significa que nos hemos colocado al margen y que desde nuestra atalaya, y de forma totalmente asimétrica, hemos estudiado al resto de la humanidad en comparación siempre con la imagen que tenemos de nosotros mismos como civilización. Cada vez que advertíamos que una cultura-mundo no era capaz de percibir alguna de las cosas de nuestra cultura-mundo occidental, eso en sí mismo lo considerábamos una merma humana, le añadíamos una valoración ética a nivel de sufrimiento o carencia; y como consecuencia de la peculiar idiosincrasia de nuestro humanismo universalista, deducíamos que teníamos la obligación moral de despertarles para que en su mundo también pudieran entrar nuestros híbridos culturales y tecnológicos.
A José Luís Guerrero
José Luis ha fallecido, el martes, y siento como si una parte del barrio hubiera también desaparecido, aquella por la que paseaba con más intimidad, agradecimiento y alegría.
Arte para la emancipación
No creo que la sola lectura comparada del Quijote y los Upanishads , o de la Biblia y el Corán, la audición del Himno de la Alegría, nos vaya a allanar el camino para que las personas podamos formar comunidades. Creo que esos diálogos culturales nos distraen del verdadero reto en el que se deberían inscribir las experiencias artísticas y la construcción continua y flexible de imaginarios, que consiste en fabricar mundos y realidades y naturalezas en común.