En febrero de 2016, hace ahora ya tres años, publiqué mi primer califacto. Durante este tiempo he publicado en este blog unas cien poesías ilustradas. Recuerdo aquel día en que me senté en la mesa de mi hija y utilicé sus rotuladores y una pluma estilográfica, y comencé a hacer pruebas sobre cómo fundir texto y pintura.
Aquí tenéis juntos lo que fueron los dos primeros intentos, y los dos últimos califactos publicados. No sé si existe una evolución, o una simple deriva.

Deja una respuesta